Cacerolas antiadherentes de acabado a la piedra: La elección perfecta para guisos y platos del día a día

Cuerpo cacerola: aluminio forjado con triple recubrimiento antihaderente de piedra.

Asas: aluminio forjado recubierto con mangos de silicona extraíbles.

Gas, vitrocerámica, alógeno e inducción.

1. Enfriar: Después de usar, deja que se enfríe a temperatura ambiente antes de lavarla. Evita sumergirla en agua fría cuando aún esté caliente, esto podría causar deformaciones.
2. Lavar a mano: Lava la sartén a mano con agua tibia y jabón suave. Utiliza una esponja suave o un paño no abrasivo para limpiarla. Evita el uso de estropajos metálicos, cepillos duros o limpiadores abrasivos, podrían dañar el revestimiento antiadherente.
3. Remover residuos: Si hay restos de comida pegados, puedes remojar en agua tibia durante unos minutos para aflojarlos. Luego, utiliza un utensilio de silicona o madera para raspar suavemente los residuos sin dañar la capa antiadherente.
4. Secar: Después de lavarla, secar completamente con un paño suave o déjala secar al aire. Evita guardar la sartén si aún está húmeda, la humedad podría afectar el revestimiento.
5. Almacenar: Guarda en un lugar seco y bien ventilado. Si tienes espacio, puedes colocar papel de cocina o protectores de sartenes entre ellas para evitar que se rayen si las apilas.

1. Lavado: Para mantener la sartén como nueva y conservar su anti adherencia, se recomienda lavarla a mano con un estropajo suave y agua caliente.
2. Ubicación en el lavavajillas: Coloca de manera que no esté en contacto directo con otros utensilios o elementos afilados que puedan rayar el revestimiento antiadherente.
3. Programa suave: Utiliza ciclos suaves y programas de lavado de baja temperatura para preservar el revestimiento. Los ciclos intensos o altas temperaturas pueden afectar la capa antiadherente con el tiempo.
4. Detergente suave: Usa detergentes suaves y evita productos agresivos o abrasivos que puedan deteriorar el revestimiento.
5. Revisión periódica: A pesar de que apta para lavavajillas, es recomendable revisar periódicamente el estado del revestimiento para detectar signos de desgaste. Si notas que el revestimiento se está deteriorando, es preferible lavarla a mano para preservar su vida útil.